El sindicato CCOO ha informado de que la Junta General del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria aprobó anoche un acuerdo de nuevas condiciones de trabajo para sus bomberos, que tendrá una vigencia de tres años.
Según señala un comunicado, el acuerdo se ha alcanzado después de la huelga que protagonizaron los bomberos y que, finalizada el pasado mes de noviembre, dio paso a una negociación entre el Cabildo, el Gobierno de Canarias y los ayuntamientos de la isla, con los representantes de los trabajadores en CCOO, CSIF y UGT.
El portavoz de los bomberos, José María Monzón, dijo que las negociaciones han sido “muy duras y largas”, pero finalmente se ha conseguido un acuerdo en el marco que ya habían planteado en su momento, con una reestructuración de la entidad y unas medidas coyunturales para poder reducir los efectos de la crisis.
Además, el acuerdo recoge que los entes del Consorcio no sufrirán incrementos en la cuota que ya abonan por este servicio, un compromiso que los bomberos mantuvieron y plasmaron en el nuevo texto.
Monzón asegura en la nota que en esta última etapa ha sido muy importante el trabajo que ha realizado el Cabildo de Gran Canaria, con la nueva presidenta del consorcio, Encarna Galván, quien conjuntamente con el resto de miembros de la mesa de negociación ha hecho posible el fin del conflicto.
CCOO adelantó que dentro de esas medidas se encuentra una reestructuración del organigrama que existe en la actualidad, siendo lo más destacado que se mantienen abiertos los ocho parques que tiene el consorcio repartidos por toda la isla, y un incremento de personal en tres años.
Según el sindicato, el acuerdo ha sido posible con los votos favorables del Cabildo de Gran Canaria y los ayuntamientos de Arucas, Teror y La Aldea de San Nicolás.
