El ministro del Interior en funciones, Antonio Camacho, a propuesta de la Dirección General de Tráfico, ha concedido la Medalla al Mérito de la Seguridad Vial en su categoría de plata con distintivo rojo a seis agentes de la Guardia Civil de Tráfico que fallecieron en acto de servicio al arriesgar su vida en cumplimiento de su deber en diferentes accidentes de circulación ocurridos entre 2010 y 20111.
Asimismo, el ministro ha concedido tres medallas con distintivo azul a Aureliano López Heredia, ex director General de Carreteras del Ministerio de Fomento; Ildefonso Hernández Aguado, ex director General de Salud Pública del Ministerio de Sanidad; y Jeanne Picard, cofundadora de la Asociación Stop Accidentes.
Los agentes galardonados con la Medalla al Mérito de la Seguridad Vial, en su categoría de plata con distintivo rojo, a título póstumo son:
Guardia Luis Rosario Llanera. Destinado en el Destacamento de Santa María de Guía, subsector de Las Palmas, fallecido el 18 de diciembre de 2010.
Guardia Jorge Rubio Regueira. Destinado en el Destacamento de Arrecife, Las Palmas, fallecido el 23 de diciembre de 2010.
Alférez Bartolomé Delgado Cívico. Destinado en el Destacamento de Trujillo, Subsector de Cáceres, fallecido el pasado 28 de febrero.
Guardia José Manuel Donoso Castillo. Destinado en el Destacamento de Tráfico de Valencia, fallecido el pasado 24 de junio.
Guardia Carlos Rubio Guzmán. Destinado en el Destacamento de Tráfico de Valencia, fallecido el pasado 6 de agosto.
Guardia Jesús Vera Femenia. Destinado en la Plana Mayor del Subsector de Alicante, Sector de Valencia, fallecido el pasado 25 de agosto.
Compromiso con la seguridad vial
Además, el Ministerio del Interior ha concedido medallas al Mérito de la Seguridad Vial, en su categoría de plata con distintivo azul a las siguientes personas:
Aureliano López Heredia. Durante su mandato al frente de la Dirección General de Carreteras del Ministerio de Fomento ha situado la seguridad en las infraestructuras como eje de la acción del Ministerio de Fomento, ha desarrollado e implementado el plan para la instalación de vallas seguras para motoristas en la Red de Carreteras del Estado y ha liderado el plan para la mejora y señalización de los tramos de concentración de accidentes. Con todo ello, López Heredia ha contribuido de forma significativa a que las carreteras sean cada vez más seguras.
Ildefonso Hernández Aguado. Durante su mandato al frente de la Dirección General de Salud Pública del Ministerio de Sanidad ha situado los accidentes de tráfico como un problema de salud pública, y a las víctimas y a sus lesiones como un problema sanitario. Además, ha promovido la consideración de las lesiones como un elemento básico del registro de accidentes y víctimas y se ha implicado en el estudio y consideración de los problemas derivados del alcohol y las drogas como causa de los accidentes de tráfico. Hernández Aguado ha hecho que el sistema sanitario esté cada vez más presente en la política de seguridad vial.
Jeanne Picard Mahaut, cofundadora junto con Ana María Campo de la asociación de ayuda a los afectados por accidentes de tráfico Stop Accidentes y vicepresidenta hasta el año pasado. Picard Mahaut ha ayudado a consolidar la participación de las organizaciones contra los accidentes de tráfico en la política de seguridad vial, ha participado activamente en los foros anuales contra la violencia vial, y se ha convertido en un referente para todos los sectores implicados en la seguridad vial.
En el año 2007, inició además una activa colaboración con las diferentes asociaciones de víctimas de Latinoamérica, que ha culminado con la creación de la Federación Iberoamericana de Asociaciones contra la Violencia Vial en 2010, de la que es presidenta. De este modo ha potenciado la presencia de las víctimas en las jornadas, encuentros y congresos relacionados con la siniestralidad del tránsito en Latinoamérica.
La concesión de estas condecoraciones se produce de acuerdo a lo establecido en el Decreto 2464/74, de 9 de agosto, por el que fueron creadas: “el incremento del tráfico viario y la necesidad de la colaboración de todos los usuarios de las vías públicas para que aquél se desenvuelva dentro de las más estrictas normas de seguridad, armonía y fluidez aconsejan que, así como se sancionan las conductas antirreglamentarias, se honren o premien las que entrañan una importante aportación a la seguridad vial, tengan un notorio relieve en la salvaguardia de ésta o constituyan un ejemplo encomiable para los demás”.
