Aprovechando las fiestas de carnaval, el Tuenti de la Policía y la Guardia Civil, que ya cuenta con 60.000 seguidores, ha lanzado una alerta a los jóvenes: “Deja la máscaras para carnaval. En Internet sé tú mismo. Con la identidad no se juega”, recordando que la suplantación de personalidad es delito.
“Hacerse pasar por alguien que no eres no es ninguna broma…y suplantar la identidad de alguien a través de Internet es un asunto muy serio por el que puedes llegar a ser acusado de un delito, el de usurpación de estado civil, y meterte en más líos con la Ley”, advierte.
La web del “Plan Contigo” destaca que con relativa frecuencia las Fuerzas de Seguridad tienen que intervenir en casos en los que un joven “ha jugado a ser quien no es” y “ha hecho daño a gente”, colgando por ejemplo fotos comprometidas en la Red o enviando mensajes a nombre de terceros, actitudes que pueden acarrear consecuencias legales.
Para evitar ser la víctima de una suplantación de personalidad, la Policía y la Guardia Civil recomiendan controlar correctamente las configuraciones de seguridad y privacidad en las redes sociales y evitar el contacto “intenso y repentino” con desconocidos.
“Si tú o gente de tu entorno necesitáis ayuda, ya sabes donde la encontrarás: en las comisarías de la Policía Nacional, puestos de la Guardia Civil y en nuestras webs. Te atendemos, como siempre, en el mail plancontigo@mir.es”, añade.
Desde el pasado mes de noviembre, la web del Plan Contigo pone a disposición de todos los jóvenes que se comunican cada día a través de Tuenti un espacio en el que informarse de problemas como el acoso escolar, las drogas y el alcohol, las bandas juveniles, los riesgos de Internet o la violencia de género.
Coacción a 600 adolescentes a través de redes sociales
La Policía Nacional ha detenido en Viator (Almería) a un joven de 20 años que, a través de las redes sociales, había coaccionado bajo amenazas a al menos 600 adolescentes de entre 12 y 17 años para que posaran desnudas frente a la pantalla del ordenador.
Según las fuentes, un primer estudio del abundante material incautado apunta a que el número de víctimas podría ser superior a 600 y que el detenido llevaba actuando desde al menos el año 2007.
Para eludir los controles y dificultar la acción de la Policía, el arrestado había creado más de 500 perfiles en diferentes 
redes sociales por medio de otras tantas direcciones de correo electrónico.
Después contactaba con sus víctimas, chicas menores de edad, a las que amenazaba con difundir imágenes de ellas en páginas de contenido pornográfico o con infectar sus ordenadores con un virus informático si no le enviaba fotos sin ropa o se desnudaban delante de la webcam.
“Soy hacker, tengo fotos tuyas y voy a publicarlas en páginas X y aportar tu perfil en chat X y puedo introducir virus en tu ordenador a menos que me mandes fotos desnuda o enciendas la cam”, era uno de sus mensajes amenazantes.
Una vez que conseguía que las menores accedieran a sus peticiones, el detenido grababa las imágenes con diferentes aplicaciones informáticas y las guardaba como “trofeo” en numerosos CD y DVD que han sido localizados en su domicilio.
La investigación se inició en Oviedo tras la denuncia de una de sus víctimas, una adolescente de 12 años, que había sido coaccionada por el detenido cuando estaba conectada a una red social en Internet.
